La cuenta regresiva para el año nuevo
Estamos a un mes para que este año termine, e inicie uno nuevo, y es el claro ejemplo de finales y comienzos; siempre he sentido diciembre como un mes lleno de emociones, muchas emociones; por años no me gustaba, ahora creo que lo he tomado con calma y ecuanimidad.
Ni agradable ni desagradable; hermoso aprendizaje del budismo y el mindfulness, sólo es.
Claro he notado que esto no solo me pasa a mi, que mucha gente se siente feliz de que han logrado sus metas, a pesar de lo que se haya podido interponer como obstáculo en este año, pero también hay mucha gente frustrada por lo que no pudo lograr este año, la lista de intenciones, de mejoras, de cambios, quizá sólo duro unos pocos meses.
“No persigas, no busques, no preguntes, no golpees, no exijas, relájate.” Osho
Por muchos años estuve metida en la marea de no lograr mis objetivos y mirar que los años se cerraban y empezaba uno nuevo con una sensación de estancamiento. Hasta que me solté a la vida, hasta que logre relajarme, hasta que comencé a vivir en el aquí y el ahora. Y por supuesto que es una práctica diaria, como ser humana, se me olvida, y tengo que regresarme al momento presente, manteniendo ecuanimidad.
¿Y cuál es mi secreto?
El yoga, la respiración y el mindfulness o atención plena una y otra vez, todos los días, e incluso varias veces al día, porque mi mente inquieta y curiosa, constantemente se quiere ir.
Entonces el secreto es permanecer presente, nada termina, nada comienza, el tiempo es algo inventado por el hombre, el hombre que necesita estructura. No pasa nada, tener intenciones, metas, sankalpas, está bien, ir poco a poco, paso a paso, sin abrumarnos por la meta en esí, y construir el camino en el presente.
¿Qué puedes hacer hoy para sentirte mejor?
Respira, Inhala, Exhala y presta atención a ello.
“El zen es la liberación del tiempo. Para que cuando abramos los ojos y veamos claramente, se vuelva obvio que no hay otro tiempo que este instante, y que el pasado y el futuro son abstracciones sin una realidad concreta.” Alan Wilson Watts